Cuando disponemos de varios sofás —suele ser habitual tener un sofá de tres plazas y otro de dos— puede resultarnos complicado encontrar la mejor distribución.
En este artículo vamos a hablar de las diferentes disposiciones a las que podemos optar en el caso de que tengamos dos sofás o un sofá y un par de sillones.
Antes de nada, debemos tener claras las distancias mínimas que debemos dejar alrededor del sofá. Por ejemplo, las zonas de paso entre los muebles deben disponer de al menos 80 cm; con respecto a la mesa de centro, debe haber al menos 40 cm entre esta y el sofá.
Hay tres disposiciones típicas en un salón: colocar los sofás en forma de U, en forma de L o enfrentados:
- En forma de U: es una disposición multifuncional, sirve para facilitar la conversación, ver la tele o picar algo entre amigos. Una mesa de centro es prácticamente imprescindible en este caso.
- En forma de L: para aprovechar un rincón y para facilitar la visión de la televisión desde cualquier punto, colocar los sofás en forma de L es una apuesta ganadora. Puedes aprovechar el hueco que queda entre los dos sofás para colocar una mesa de apoyo, una planta vistosa, una lámpara…
- Enfrentados:
- esta disposición es perfecta para recibir amigos, pero no tanto para ver la tele. También es muy típica en salas de espera. Si eliges esta distribución, recuerda que la separación entre ambos sofás debe ser de al menos 150 cm.
A tener en cuenta al colocar el sofá
Habitualmente, se tiende a colocar el sofá en la pared más larga del salón. Es una norma que suele funcionar bien en la mayoría de las ocasiones. Aunque, si por la forma de tu salón, en tu caso no queda bien, puedes saltártela —para esto están las normas, ¿no?—.
Ten en cuenta puertas, ventanas y terrazas. En el caso de puertas (tanto del salón como de la terraza), si el sofá está ubicado cerca, asegúrate de que hay espacio para abrir la puerta por completo.
Con respecto a la ventana, el sofá puede estar ubicado bajo ella solo en el caso de que podamos abrirla.
La ubicación de la tele suele condicionar cómo ponemos los sofás también. Ten en cuenta que el televisor no debe estar enfrentado a una ventana, ya que la claridad te impedirá ver la pantalla en muchas ocasiones.
Si te gusta seguir los preceptos del Feng-Shui, este dice que el sofá debe estar pegado a la pared, en un lugar desde el que podamos ver todo el salón y nunca de espaldas a la puerta.
Por último, si tienes dudas sobre el tamaño y la disposición de los sofás antes de comprarlos, prueba cómo quedarían marcando el suelo con cinta de pintor. Podrás comprobar si el espacio fluye, si puedes caminar con comodidad entre los muebles y si las medidas son las correctas.